sábado, 24 de enero de 2015

Gritando pensamientos


Estoy cabreado. Molesto. Torpemente ofuscado. Son esos momentos en que la tentación llama a mi puerta. En la que grita más fuerte que nunca. Tengo ganas, no, deseo rebanarme la carne de lado a lado mientras mi conciencia intenta usar el autocontrol y lo niega.

Llevo mucho tiempo sin dañarme de esa forma y no son pocas las veces que se me cruza por la cabeza, por la simple razón que mientras estoy rasgando mi piel no pienso en nada más, solo veo el filo deslizándose y la sangre brotar. Fin. Nada más. Luego viene una sensación de calor en todas las heridas y, más tarde, el dolor que se prolonga durante días.  Me resulta incoherente echar de menos algo así cuando sé que no sirve de nada; de absolutamente nada. Pero no tengo muy claro cómo lidiar con ello si no es ocupándome con otra cosa y dejándolo pasar. 

Let it go.
Let it go.

Y todo esto porque mi peso está estúpidamente inestable. Que ahora subo un kg y luego bajo 300gr. Ahora como más y bajo más. Ahora como menos y subo. Y estoy hasta las narices de este desorden, prefiero que se mantenga en el mismo número siempre y ya está. todos contentos. 

Intento hacer las cosas bien. Lo intento de verdad. Estoy tres o cuatro días sin vomitar. Por las mañanas inspiro profundamente cuando me peso y me digo que no pasa nada, que es un número, que no estoy gordo, que como mi sistema digestivo es una puta mierda aún no he digerido la cena y por eso peso más. 

Pero al final es lo mismo: Todo se rompe. Y colapso. Me enfado, Con todo. Con todos. Vuelvo a vomitar pero el peso no baja hasta pasados unos días. Me planteo no comer pero me resulta imposible, así que paso a alimentarme de comida con pocas calorías y a seguir vomitando.

Y se me hace patético y triste, pero nadie quiere verme enfadado, ni tan siquiera yo mismo. Me vuelvo el ser que no quiere ser. Lo que soy en realidad. Lo rechazo absolutamente todo, desde una palabra de comprensión hasta una sonrisa. No quiero saber nada del mundo. Nada de nadie. Solo pienso en... ¿nada? Y lo que se me cruza por la mente dejo de ponerle flores y adornos; Lo suelto y listo.

En el fondo sabía que cambiar de país no significaba estar mejor, solo tener más libertad de hacer lo que quiera. Y no me puedo quejar porque las cosas aquí van realmente bien y agradezco todo el apoyo y ayuda brindados para llegar donde estoy, pero el problema principal, yo, persiste. Y es algo que no sé cómo paliar ni tragar, solo intento dejarlo pasar un día más y no darle demasiadas vueltas.

Pero de momento, voy a ir a estrujar un rato a mi perra.


6 comentarios:

  1. Mi consejo sería que te fueses a un lugar solo, a las montañas, a la playa, no se, que te distraigas unos días allí, tal vez encuentres una forma de ir mejorando, sigue esforzandote no te rindas... Ánimos principe que aunque no lo creas quiero que estés bien <3

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  2. El problema siempre es uno, tampoco sé como aliviar el sentimiento. En realidad creo que el lugar o la compañía importan muy poco, el tema es otro. No es el cuerpo ,es todo.
    Bueno, espero que pase. Un abrazo.

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  3. Varias personas ya me han dicho que "el dolor no se alivia con más dolor" pero al momento de cortarme siento una descarga de adrenalina que me provoca una sensación de calma, lamentablemente efímera. A mi novio le duele ver que yo lo hago pero siempre me limito a contestarle: "No sé que hacer con estos sentimientos, cortarme me ayuda a sentirme mejor cuando parece que todo va muy mal", por ese lado te entiendo, pero lo mejor que puedes hacer es tratar de distraerte con cualquier cosa, respirar muy profundo y tranquilizarte. Eso es lo que he estado haciendo estos últimos días y me viene muy bien, ya llevo poco más de 1 semana sin cortarme.

    Con el peso sólo puedo decirte que subirte a la balanza diariamente únicamente hará que te estreses porque el peso siempre va a variar ya que depende de muchos factores (los cuales no mencionaré porque son demasiados y esto se convertiría en un ensayo). Tú eres inteligente y lo sabes, no dejes que tus fantasmas te nublen la razón y te engañen. Prueba sólo subirte a la balanza cada 15 días, creeme que a la larga te dará resultados más fiables y mayor tranquilidad.

    Espero que esta fase pase pronto y te encuentres mejor =)

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  4. En momentos de tensión, cuando sientes que todo se te va de las manos a mi me entran ganas de lastimarme (solía tener ganas de clavarme un cuchillo en los muslos), de vomitar mis problemas. Si bien no hago algo fulminante. Luego descubro arañasos en las piernas y me maldigo por hacerlo... Es complicado dejarlo por completo, pero confío que poco a poco se puede abandonar estos hábitos adictivos, paciencia...
    Sobre los vómitos, creo que se pueden controlar mejor que el hecho de lastimarnos, porque si o sí son planificados. Te recomiendo no vomitar, si ya lo has intentado (osea intentar dejar de vomitar), aunque hayas fracasado cuenta y vale mucho. Sigue haciéndolo y creo que lo dejaras de a poco. No desistas.
    Apreciar los pequeños cambios, sirve de mucho, si caemos hay que volver a levantarse, volver a comenzar desde cero.
    Mi máximo error son los "picoteos de comida". Y luego hago ejercicio para quemarlos, pero me siento (como señalaste) patética, ridícula... Me pregunto ¿por qué sencillamente no puedo dejar de picotear así luego no me mato haciendo ejercicio para quemar lo picado? Pero no es sencillo. Hay que seguir trabajando. Aunque hay días malísimos también hay buenos y hay que aferrarse y a ello y confiar en que todo estará mejor... No queda otra. La otra opción es rendirse y esa palabra me resulta repulsiva.
    Si no llegas a comprender completamente cual es tu problema (el problema que dices que reside en tí, más allá de tu cambio de país): Yo te digo ¿qué más dá? Sigue adelante como señalas. Si te lastimaste ¿qué mas dá? No detendras la sangre ni las heridas al sentirte peor. Lo único que puedes cambiar es tu Actitud a partir de ello. Persiste, lucha y sigue adelante.
    Te envío un abrazo, amigo.

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  5. Qué te puedo decir sobre cortarte, supongo que me alegra que no lo hayas hecho. Ya es un gran paso.
    No voy a darte lecciones de nada porque me imagino que tú ya sabes de sobra lo que es el peso, lo que son los vómitos y lo que son los cortes; me da la sensación de que somos bastante veteranos en lo que a TCA se refiere. Pero lo del peso es algo que ocurre. Siempre. Da igual cuánto te esfuerces, el día que ayunes igual subes porque retienes agua, o el día que te atracas, será que 'has despertado tu metabolismo'. No le busques una lógica, sigue adelante.
    Achucha más a tu perra y no te agobies tanto.

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  6. Prueba algo que igual te calme pero sea menos vistoso o dañino...no te digo que para no dar ideas...pero eres inteligente y se que mas o menos pillaras de que otra forma puedes dañarte, que necesite concentracion igualmente y que no deje tantas marcas.No deja de ser una autolesion tambien, pero se esconde mejor.Y no te sientas mal por canalizar asi la ira.Quizas a ti, como a mi, nunca te enseñaron a tolerar la frustracion y aprendiste esta conducta por ti mismo para soportar esos sentimientos tan jodidos.Animo.

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